lunes, 18 de junio de 2012

Retrato



Andaba de mucho texto y poco dibujo. Vamos entonces con este estudio de retrato en Corel Painter 11. Abur.

Otra de Ray

Por los pagos en los que vivo hay un programa de radio que se llama Yo te quiero libre, sobre pespectiva de género. Las buenas pero irresponsables personas que lo llevan adelante -gente amiga, claro, muy apropiado para el caso eso de "el viento los amontona"- me pidieron que escriba una reseña sobre Bradbury. Como para reseñas está Wikipedia, yo escribí esto. Y como buenos irresponsables que son, lo leyeron.

Gracias, che.

Me había quedado colgado un encuentro con Bradbury en la feria del libro de 2001. Ahí fui yo con mi libro para firmar, pero él no vino. “Problemas de salud”, dijeron. Y pensé que el momento de decirle gracias en mal inglés se había perdido.
El miércoles 6 el hombre decidió empezar otro viaje.  Yo no quería que se me pase otra oportunidad de encontrarlo, y pensé “por ahí lo atajo en el camino”. Desempolvé mi tabla ouija de emergencia e hice la pregunta de rigor: “Señor Bradbury, ¿está usted ahí?”. Y nada…el triangulito no se movía.  Algo no marchaba. Me fijé si la tabla estaba todavía en garantía pero no tenía ni un 0 800…Volví a preguntar una, dos, tres veces sin resultados.  Y me  impacienté.
-¡Señor Bradbury!... ¡EH, RAY!  - le grité a la tabla muda.
La tabla salió volando, se estrelló contra la pared, y un modelo de tiranosaurio que tengo en el escritorio se adelantó
-Estaré muerto pero no soy sordo. Y Ray está mejor que señor Bradbury.
Los lectores de ciencia ficción nos bancamos la materialización de cualquier cosa posible, pero los dientes del tiranosaurio se veían  un tanto amenazadores, así que retrocedí.
-¡Señor Brad…Ray, qué bueno encontrarlo! Yo quería decirle que…
Se empezó a escuchar música, voces de otras personas, risas, muchas risas. Alguien gritó:
-¡Eh, Ray! Philip dice que te apures que ya llegaron todos. ¡Edgar está preparando la suelta de cuervos! ¡Trajimos champán!
 ¿Por qué estaba entendiendo lo que decían? Debe ser que en estas ocasiones los idiomas no son interferencia. ¡Phillip y Edgar! Cuando caí seguro  que se me desorbitaron un poco los ojos o habré puesto mi mejor cara de idiota asombrada. El tiranosaurio Ray captó el gesto.
-¡Dick y Poe, claro! ¡Ya voy, ya voy! Es que todavía no brindamos y… ¡Eh, Sturgeon, decile a Mary que espere!
No pude escuchar el resto. El ruido tapaba las palabras. ¿De dónde habrán sacado las cornetas? Además me parecía que sonaba el carnaval carioca.
-¡Ray! ¡Espere! Yo quería decirle que…
-¡No te escucho! ¿Qué?
-QUE YO QUERIA DECIRLE…
El ruido fue mermando hasta que fue silencio. El tiranosaurio volvió a su lugar y ahí se quedó, mostrándome con su inmovilidad que volvía a ser plástico pintado. Yo quería decirle muchas cosas, como un millón. Que aprendí a leer con él, que cuando era chica quería estar la Noche de Brujas en Illinois y el Día de los Muertos comiendo calaveritas de azúcar en México.  Que la niña que iluminó la noche evitó que le tuviera miedo a la oscuridad y que cuando fui más grande agregué a mi tour bradburiano una visita a algún pub de Irlanda.
Qué se yo,  por ahí ya lo sabe.
Mientras acá nos quedamos un poco solos, en otro universo hay una fiesta. 

Yo te quiero libre lo lleva adelante el Colectivo Igualitario La Urdimbre y se emite los sábados de 15 a 17 por Radio Oceánica

miércoles, 6 de junio de 2012

La mortalidad es un cuento chino II


Cuando un escritor muere los universos que supo imaginar abren sus puertas para recibirlo mientras sus personajes preparan una fiesta de bienvenida: el escritor sabe todo de ellos pero ellos poco de él. Lo estaban esperando, casi con impaciencia. Hace muchos años que sospechan que hay un mundo que no conocen. Ahora nos toca a nosotros ser personajes. El se ocupará de darnos nuevos atuendos y llenar de magia nuestra mortalidad común y simple...algo que ya supo hacer mientras anduvo por acá.

lunes, 4 de junio de 2012

Gosford Park



Excelente película coral de Robert Altman que inició el ciclo de cine en la biblioteca que frecuento. La cosa es que la organizadora del taller literario, Susana, pidió a los que quisieran que se manden una continuación de una historia romántica inconclusa entre el personaje de Clive Owen (Robert Parks) y el de Kelly Macdonald (Mary Maceachran) Apelé a mi Saborido interior y salió esto:

Harto de su trabajo como criado, Robert Parks se muda a Argentina a mediados de 1933. Nada se sabe de su estancia en este país hasta 1940, año en el que pone el primer parripollo de Morón. Inventa un sánguche de pechuga a la milanesa pasada por gofio, acompañada con morrón, tomate y una feta de jamón, que llama Gofioparc. Esto le granjea un ascendente éxito gastronómico, principalmente impulsado por el consumo de los colectiveros de la línea 153. En 1946, Perón pasa casualmente por su puesto y prueba el Gofioparc. Encantado, el General incluye en el mensaje presidencial destinado a anunciar el Plan Quinquenal la frase "quien se diga peronista debe saber zamparse un Gofioparc". El negocio cobra un impulso sin precedentes y Robert abandona el puesto para trasladarse a un local sobre Rivadavia, frente a la estación del Ferrocarril Sarmiento. El 14 de agosto de 1947, mientras Robert supervisa la llegada de un importante cargamento de gofio, un conductor ebrio estrella su camión contra una pared de la zona de descarga y las bolsas de harina son despedidas del remolque. Una de ellas golpea la cabeza de Robert, provocándole una contusión que lo lleva a la muerte. Con suma tristeza, Perón anuncia tres días de luto por la desaparición del creador del famoso sánguche. A partir del año siguiente y hasta nuestros días, el 14 se agosto es conocido como el Día del Gofio, en el que se recuerda a Parks arrojando bolsas de harina desde los balcones a los transeúntes desprevenidos.

Luego de los trágicos incidentes acaecidos en Gosford Park en 1932, Mary pierde el rastro de Robert. Ese mismo año decide dejar el servicio, se muda a Manchester y se emplea en el lavadero Dirty Citizens, del que será propietaria en 1941. El 15 de agosto de 1947, el periódico The Manchester Guardian ocupa su portada y sus páginas principales con el anuncio del fin de la ocupación británica de la India. Mary recoge el diario en la puerta de su pequeño apartamento y descubre una nota de escasas líneas en la página 36 que anuncia los tres días de duelo en Argentina por el fallecimiento de Robert Parks y cita las palabras de despedida de Perón: "hacía los sánguches más peronistas de todo el país". Con el corazón destrozado, Mary comienza a comprar bolsas de gofio hasta abarrotar su casa y luego, con una cuchara de plata en su mano, abre la primera bolsa y comienza a comer su contenido. Seis semanas después, la policía encuentra en ese lugar el cuerpo sin vida de una mujer de 338 kilos, abrazada a una bolsa aún sin abrir.

domingo, 3 de junio de 2012

Otro oldie


Este dibujo ilustró el cuento Pleamar, de Marcelo di Lisio, que salió publicado en el número 154 de la revista virtual Axxon. Fue y vino varias veces de Corel Painter a Photopaint y así quedó.